11/09/2009

Pintor navegante



En un tiempo de collages, instalaciones, videos y arte sonoro, la pintura de César Rangel es un refrescante recordatorio del poder que puede tener un trazo sobre papel. Su obra es coherente y regresa a la simplicidad. Abre un océano de posibilidades con sólo plasmar un elemento constante: el agua. En azul vive una ciudad-nave y un ave. En azul flota un sentimiento de libertad, que no está perdida ni hay sensación de naufragio; tampoco de pertenencia. No nos satura de ideas y conceptos, sólo nos sugiere un personaje o un lugar. Nos deja navegar en la claridad del blanco y la nostalgia del mar.